martes, 29 de noviembre de 2011

Un celiaco en el Hospital

Va un celiaco al hospital... si, tiene pinta de chiste pero no lo es. Recientemente pasé una noche en el hospital Miguel Servet de Zaragoza para hacerme una pequeña intervención. Nada grave. Y me sorprendió gratamente el menú que me sirvieron. Por eso le hice fotos a todos los platos y puedo mostraros aquí como nos cuidan los hospitales aragoneses a los celiacos. ¿También sería que no lo hicieran no? Porque si no fuera así, mal iríamos llevandonos la comida para una estancia hospitalaria de varios días.

CELIACA PRECAVIDA VALE POR DOS

Aún así he de reconocer que me llevé galletas saladas, unas chuches y frutos secos. Porque otra cosa no, pero precavida una celiaca debe serlo siempre. Bueno, no os digo más, hasta me llevé un pijama, porque tal y como están las cosas… pensaba que no me iban a dar. Me dieron si, uno de esos camisones con aireación trasera. Así que en cuanto pude me puse el mío.

PARA CENAR...

Para cenar: judías verdes con patatas y tortilla de patata. Prestar atención a las etiquetas, el precintado de los platos, el pan sin gluten (de molde de Beiker)… Era la primera vez que permanecía en el hospital desde mi diagnóstico y la verdad no esperaba mucho, pero oye, me llevé una gran alegría.

EN EL DESAYUNO...

Para desayunar si que eché en falta unas tostadas con mantequilla y mermelada como mi compañera de habitación no celiaca. No se para qué tanta fruta…

Y este fue mi menú durante mi corta estancia. Me comí las galletas saladas, las chuches y los frutos secos, todo. No por la cena, si no por el hambre que pasé el día que ingresé, que tenía que ir en ayunas a la intervención y después hasta que llegó la cena a mi estómago se le hizo eterno...






domingo, 27 de noviembre de 2011

La mejor tapa celiaca. ¡Que gane el mejor!

Tapa de El Morrudo
 He de anunciaros que mi decisión final sobre la mejor tapa sin gluten del Concurso de tapas de Zaragoza puede cambiar. Es complicado decidirse por una. Hay mucha competencia porque hay varias que están muy conseguidas y elaboradas. Parece que los restauradores nos toman en serio, y eso se agradece de verdad. Hace unos años sólo dos bares hacían tapas sin gluten. Este año ya son 12, así que algo hemos avanzado.


EL MORRUDO

Ayer seguí probando las de varios establecimientos, entre ellos la de El Morrudo, en la calle Azoque, que me pareció riquísima. Era de ternasco con queso gratinado. Pero no sólo eso. ¡Es que pude cenar con pan y cerveza sin gluten! Tomé unas alcachofas con foie, unos quesos y huevos rotos con chorizo, longaniza, morcilla y patatas fritas. ¡Me pareció el paraíso! Vamos que volví a tocar el cielo, el cielo sin gluten claro.

¡Suerte para todos lo participantes y que gane el mejor!

miércoles, 23 de noviembre de 2011

De tapas sin gluten por Zaragoza

Hoy he comido de tapas, de tapas sin gluten por supuesto. Nos hemos juntado tres amigas y hemos decidido disfrutar de lo lindo del 17 Concurso de Tapas Ciudad de Zaragoza. Que una vez al año no hace daño oye. De 120 bares y restaurantes que participan, 12 ofrecen tapas sin gluten. Hemos visitado La Farola (la tapa original es sin gluten), Café del Sur (la aragonesa es apta para celiacos), New Corner (ganador del año pasado y las tres tapas aptas) y Yeyeguillén (participa con una sola tapa también apta). Y degustado 6 tapas, un postre y unas cervecitas sin gluten. ¿No está mal no? Y con el día que ha hecho hoy en Zaragoza, casi 20 grados, hasta hemos comido unas en una terracita al sol.

Por siete euros puedes comer 3 tapas acompañadas de sus 3 bebidas. ¿Qué os voy a contar? Lo peor, que los bares que hacen tapas sin gluten están muy alejados unos de otros y hay que coger taxi para ir. Lo bueno, todas estaban riquísimas con su pan, su gratinado, su rollito de arroz, su montadito de rabo de toro, sus albóndigas de ternasco y por la que yo he votado para la mención a la tapa sin gluten que es la que os muestro en la foto: espagueti de arroz y rollito de espinacas con salsa de marisco. (es una descripción pura y dura porque no me acuerdo del nombre oficial) MMMmmmmmmmm


jueves, 17 de noviembre de 2011

9 cosas que la celiaquía cambia en tu vida social


Mi vida social también se ha visto afectada en estos dos años, por supuesto que sí. He ido de tapas en contadas ocasiones, se me ha desarrollado un ojo de lince para controlar el gluten en las comidas de grupo y cazo a los mentirosos a la primera (mentirosos me refiero en los restaurantes y demás, cuando preguntas por un plato y enseguida te dicen que no lleva gluten cuando tú sabes al cien por cien que si). 

COSAS POSITIVAS

Pero también hay muchas cosas positivas: He conocido a gente con la que nunca habría coincidido si no hubiese sido por la celiaquía. Son mis amigas las celiacas, con las que compartimos experiencias glutoneras, y sin ellas no habría podido seguir la dieta y adaptarme a la enfermedad tan rápidamente. 

Además están mis amigas de siempre, a las que les agradezco su capacidad camaleónica porque cuando tienen que ser celiacas en un restaurante lo son a la hora de compartir pizzas y demás, y cuando no, pues van a lo suyo y tan contentas. También su apoyo y comprensión cuando han vivido mi desilusión frente a un plato "bomba de gluten".

9 COSAS QUE HAN CAMBIADO EN MI VIDA SOCIAL

Hay algunas otras cosas que han cambiado en mi vida social y con las que seguro os sentís identificadas.

-Mi agenda de restaurantes se ha reducido a 4
-Mis bocadillosde pan con tomate y jamón (hablo de un bocadillo en condiciones) se han reducido a 0
-Mis chocolates con churros 0
-Mis bolsas de chuches o frutos secos comprados a granel 0
-El peso de mi bolso ha subido a 10 kilos: voy siempre de medio lado con bolsitas de galletas, fruta y un pequeño bocadillo por si acaso el hambre me pilla por sorpresa.
-La sorpresa de la gente cuando les dices que eres celiaca es notable. El sentimiento que provoca no es universal: o te hacen sentir importante o rara.
-Me he convertido en una experta en hacer entender a camareros, cocineros y demás lo que es la celiaquía. Tengo el discurso grabado a fuego en mi mente.
-Mis amigas se han hecho expertas en celiaquia. Cuándo yo ya estoy rendida de tanto explicar, son ellas las que me relevan, y ¡casi lo hacen mejor que yo!.
-Me encanta mirar las etiquetas (a la fuerza ahorcan) para intentar probar productos diferentes. Y también me he hecho experta en comparativa de precios. Te puedes ahorrar hasta 5 euros en una compra de 20 euros según el supermercado/tienda en la que haces la compra.

Seguro que hay algo que vosotros echáis en falta, así que la 10ª cosa que la celiaquía ha cambiado en tu vida social la tienes que proponer tú.

martes, 15 de noviembre de 2011

9 pistas que delatan a un celiaco


Después de dos años de celiaquia me he dado cuenta de los cambios que ha sufrido mi casa, mi vida social y sobre todo mi conversación, porque hay algunas frases que no paro de repetirlas. Está el “cuidado con el pan” en todas las comidas familiares. Somos 5 hermanos y cada vez que nos juntamos a comer es un peligro. En mi casa nos gusta mucho poner de primero todo para picar en bandejas en el centro de la mesa. “Ojo”, “cuida”, “no lo pases por encima”, “no acerques el pan”, ¡no untes en el tomate! Y así continuamente.

Después está el discurso en los restaurantes que no han visto ni oído en su vida la palabra celiaco, que más me valdría grabarlo, aunque ya he optado por crear mi círculo gastronómico y no salir de él más que en ocasiones puntuales y momentos que no puedes evitar.

Y gracias a estas y otras vivencias hoy puedo aconsejar a otros celiacos y hasta puedo dar pistas de cómo descubrir a uno, sobre todo si vas a su casa.

9 PISTAS QUE DELATAN A UN CELIACO EN CASA

-Hay cuchillos y cucharas para fregar por todos lados
-Hay tuppers en todos los armarios, congelador y nevera
-Los cierres de bolsas de colores son innumerables en la nevera, armarios…
-Las etiquetas están por todos sitios
-Las estanterías se han dividido y repartido como en un piso compartido “Sin gluten” y “Con gluten”
-La vigilancia de las sartenes y la plancha es máxima. Si mi pareja se hace un sándwich, hay que estar al tanto de hasta donde llega el gluten.
-Las sartenes están siempre en el lavavajillas
-Los sellos de “sin gluten” inundan los productos envasados en la nevera. (léase en embutidos, patés…)
-El precio de la cesta de la compra ha subido una cantidad que no puedo cuantificar (esto el que viene de fuera no lo ve, pero ya le digo yo que es así)

Y pongo 9 pistas porque seguro que la décima está por llegar. Espero que entre todos propongamos la que falta. Una o varias más. Las que hacen que una casa sea una casa sin gluten en condiciones.

jueves, 10 de noviembre de 2011

¿Qué misterio tiene un desayuno sin gluten?

El otro día fui con una amiga celiaca a desayunar al Vips. Ya sabíamos que sólo íbamos a poder tomar un café, o un té en mi caso, porque no tienen nada sin gluten, a no ser que quieras un yogur. Mi amiga, que es más descarada que yo, vino con una caja de palmeritas sin gluten que puso encima de la mesa delante del camarero mientras le explicaba nuestra condición celiaca.

Resulta que en Vips de otras ciudades tienen cosas sin gluten, pero en Zaragoza no lo han puesto todavía, porque según uno de los encargados “Bastante esfuerzo hacemos para que los camareros den los buenos días, sean amables y atiendan a la gente en condiciones, como para hacerles entender lo que es un celiaco”.

EL DESAYUNO, MI MEJOR MOMENTO DEL DÍA

Antes de continuar escribiendo, he de decir que para mí el mejor momento del día es el del desayuno. El sábado me apetecía salir a desayunar fuera pero mirando y mirando en la página de la asociación no encontré ningún sitio para tomar unas tostadas, o un bollo, o algo bueno para desayunar. Como El Corte Inglés ya no hace nada de nada para nosotros (a pesar de que en su página web sigue el linf de productos sin gluten) y en Valor el chocolate sin gluten es de sabores de naranja amarga y cosas así...pues he decidido dedicar esta semana al desayuno celiaco y mostrar que no es tan difícil ofrecer algo sin gluten para desayunar.

TOSTADAS CON QUESO, MEMELADA, SANDWICH, GALLETAS…


Las opciones de mis desayunos tienen en la mayoría de los casos como base unas tostadas. Desde que fui a la cata y probé el pan de Schär no he comprado otro. Tostado es el mejor. Además para beber es imprescindible té y para terminar una manzana, que me encantan.


 Así que os ofrezco unas tostadas
con queso fresco y su chorrito
de aceite de oliva por encima.
     

  Unas tostadas con mermelada y 
mantequilla y un zumo




Un sándwich de jamón y queso


Unas palmeritas y unas galletas María
sin gluten. Para acompañar con un té.
También está el chocolate de
Mercadona sin gluten, que está 
riquísimo, pero no me dio tiempo
a hacerle foto.



Así de sencillo. No tiene más misterio un desayuno sin gluten.



lunes, 7 de noviembre de 2011

Dos años de celiaquia te cambian la vida.


Este mes de noviembre cumplo dos años siendo celiaca, o mejor dicho diagnosticada de celiaquia y comiendo sin gluten, porque celiaca ya lo era desde hacía mucho tiempo. ¿Que cómo ha cambiado mi vida? Pues gastronómicamente hablando, cien por cien, vamos totalmente, y tan sólo en dos años.

COMER, COMER Y COMER

Soy una persona a la que le gusta comer, que disfruta comiendo bien, que mi mayor placer es comer y que no hay mejor sorpresa para mí que un buen plato para comer. Si comer, comer y comer. Ese es mi mayor placer, y aunque a diario me esfuerzo por mostrar a los demás que la celiaquia no es para tanto, cuando llego a casa y estoy conmigo misma preparando la cena digo “que harta estoy de la celiaquia”.

¡QUIERO MI BOCADILLO!

 
Recuerdo que hace años decía, “para mi no hay peor cosa que te quiten de comer”. Primero fue la lactosa y finalmente el gluten. Mi estómago se había acostumbrado a sus crisis regulares, pero después mi mente resolvió que eso no era normal. Y no lo era. La celiaquía y la lactosa son sólo algunas de las alergias que tengo, pero no quiero mortificar a nadie nombrándolas. 

Aún así soy feliz, aunque no voy a negar que ansío todos los días un bocadillo de pan con tomate y jamón. Pero un bocadillo de los de verdad, de los de pan crujiente.Y es que ¡quiero mi bocadillo! como Hommer Simpson. ¿Es posible que algún día inventen un pan en condiciones para bocadillos? Estoy abierta a todo tipo de catas de pan sin gluten, pero por favor un poco de empeño. Esta es mi reivindicación por mis dos años celiacos.

YO SOY NORMAL, SON LOS DEMÁS LOS QUE NO LOS SON

Quiero aprovechar este post para felicitar a aquellos que cumplen años celiacos este mes y para darles ánimos, que de vez en cuando los necesitamos. Porque aunque los celiacos somos gente normal, hay veces que te preguntas “¿por qué me ha tocado a mi?” y eso te saca de la normalidad por unos minutos, hasta que vuelves en tí y dices “¡Qué narices, pero si yo soy normal, los anormales son los demás que no entienden algo tan sencillo como que no puedo comer harina!”

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Mi plan sin gluten ha funcionado

Celiacos hay que espabilar y ser listos que si no se te comen y te tienen todos los días a dieta de lechuga y carne a la plancha. Ya os he dicho en alguna ocasión que de ilusiones no come un celiaco. A mi al menos me ha funcionado el plan. Mi suegra se ha dado por aludida con mi anterior post y ha venido a casa a cocinar. Como comenté que el menú que me ofrecía en su casa era ensalada y carne a la plancha, se ha indignado y ha querido demostrarme que ella sabe hacer platos sin gluten.


En proceso
Croquetas










Ha venido cargada de cosas, se ha encerrado en la cocina y allí ha estado un buen rato dale que dale. Y éste ha sido el resultado, la nevera llena de comida para pasar la semana. Croquetas de pollo y jamón riquísimas. 

Albóndigas
Albóndigas preparadas ya para hacer con cualquier salsa que me apetezca. 

 






Una tortilla de patata, que es universal y apta para todo el mundo, pero ella las hace riquísimas. 


Carne empanada con huevo, harina y pan rallado, todo sin gluten por supuesto y un arroz con leche sin lactosa ( no me ha dado tiempo a hacerle foto porque me lo he comido ¡todito!)

Esto es para que no me vuelva a quejar más de mi suegra. Ella me ha dado un lección y yo encantada de la vida, claro. Ahora estoy esperando a los amigos, ¡a ver si reaccionan!

PD: Una tarta de chocolate no estaría nada mal.