Se acabaron las vacaciones celiacos. ¡Ya estoy de vuelta! Bruno ha empezado en la guardería muy contento y yo he decidido comenzar el nuevo año escolar fuerte, con energía. De ahí este bocata de jamón con pan sin gluten. Porque uno no puede empezar el curso de cualquier forma, no puede volver a la rutina diaria sin más. Hay que hacerlo a lo grande, como este bocadillo.
Y de allí para arriba, nunca a menos, siempre a más celiacos. Que luego llegan las depresiones postvacacionales, que las llaman, y no podemos permitirnoslo. Un buen bocadillo como éste alivia todas las penas, al menos de momento. Ñam, Ñam ... ¡a empezar con buen pie celiacos! Que las penas con un buen bocata de jamón sin gluten son menos penas.
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Y tanto que quita las penas! Qué aproveche!
ResponderEliminarGracias!! Me sentó genial!
EliminarPues tienes toda la razón. Un buen bocadillo de un buen jamón te alegra el día.
ResponderEliminarY el pan con tomate ya... la repanocha!
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